sábado, 2 de marzo de 2013

En menos de diez años, la producción mundial de carnes no acompañará la demanda


 Lo dijo Dardo Chiesa, ex presidente del IPCVA. Se quejó por los altos costos de producción internos, que le quitan competitividad a la ganadería local y hace perder mercados.

El mercado ganadero se encuentra en una dualidad. Por un lado, una situación internacional que demanda cada vez más alimentos, y por otro, un contexto interno con altos costos que desincentivan el incremento de la producción. Dardo Chiesa, ex presidente del IPCVA e importante analista de la materia, explicó cómo conviven esta demanda creciente y un atraso cambiario que perjudica la posibilidad de exportar más.

“Las perspectivas del mercado internacional son muy buenas. El mundo crece a tasas importantes demográfica y económicamente. La proyección dice que, para 2050, con la tecnología de hoy, no va a alcanzar la producción para alimentar al mundo”, analizó Chiesa.

Sin embargo, ve también que el desincentivo a la producción de carne no es solo un fenómeno local: “La producción de carne vacuna se ha ido desactivando en bloques históricos. La perspectiva para el 2020 es que la oferta de carne no vaya a acompañar el aumento de la demanda. El precio de todas las carnes va a subir, y en especial la carne vacuna”.

En el mercado interno, en cambio, “estamos blindados”, describió: “En 2005 exportábamos 770 mil toneladas. Empezó el desencuentro con la política oficial, pusieron retenciones, vino el cierre de exportaciones, los cortes populares, la barata…un montón de cosas que hicieron que el aparato productivo argentino se desincentivara. Los ROEs fueron la barrera más importante de los últimos años”.

Por ello, “A partir de 2009 se da que el mercado interno convalida precios que nunca había convalidado”.

El tipo de cambio atrasado, sumado al 15% de retenciones, atenta contra la posibilidad de exportar: “Al dólar oficial menos el 15% hace que lo que cobra el exportador sea algo más de cuatro pesos. Así, la tonelada de carne se vende a cinco mil dólares. A ese precio, no le podemos vender a Rusia, a Venezuela, a Marruecos o Chile. Paraguay está vendiendo a 4500 o 4600 (dólares por tonelada) y hay un montón de mercados donde entrábamos y ahora no”.

“A su vez, el frigorífico exportador, de esa media res, tiene que mandar a la barata de res, más los cortes populares, y hacen que se le abarate todo”, agregó.

Otro mal indicio es el aumento de faena de hembras, el cual lo explica así: “Cuando el precio del novillo sube porque no hay, como pasa ahora, ese buen precio incentiva que se manden terneras a faenar. Lo que se activa es el feedlot, que el año pasado activó la faena adicional de 2 millones de cabezas, de las cuales la mitad son hembras. Ahí es donde hipotecas el futuro”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.