Hay una buena relación de precios en la ganadería uruguaya, aunque el dólar cayó 11%

Un estudio del Instituto Plan Agropecuario, al que accedió El Observador Agropecuario, revela que persiste un buen nivel de precios en moneda corriente, aunque se detuvo el crecimiento sostenido.

Los resultados alcanzados por la ganadería en lo que va del Ejercicio 2012/2013 (julio a febrero), en especial la de carne, muestran la consolidación del sostenimiento de buenos valores en moneda corriente. Sin embargo, durante el período se verifica una caída del valor del dólar del 11%, según un estudio realizado por el Instituto Plan Agropecuario (IPA).

Los muy buenos precios que vienen acompañando con pequeñas oscilaciones desde hace varios ejercicios, vuelven a reiterarse en lo que va del año agrícola, según el análisis al que tuvo acceso El Observador Agropecuario.

Si bien es cierto que los buenos valores siguen acompañando, se ha detenido el crecimiento sostenido de los mismos que se verificó en ejercicios anteriores, afirma Carlos Molina, el autor del trabajo.

Por su parte, en el rubro ovino, no es posible decir lo mismo ni para la carne ni para la lana. Los precios de estos productos han experimentado descensos de importancia, sobre todo la carne para este último ejercicio.

También sobresale el buen estado de los ganados por el clima favorable, y de los rodeos de cría en particular,lo que permite esperar buenos resultados reproductivos en la próxima zafra.

Sin embargo, la caída del dólar de 11% desde agosto de 2012 determina que en valores constantes los precios no estén acompañando, como sí se logra en precios corrientes. A pesar de la suba en moneda corriente durante enero y febrero últimos, en valores constantes el ternero tiene un descenso de 6,2% y el novillo de 3,8%.

También es posible que nuevamente los costos de producción por unidad de superficie vuelvan a incrementarse, como en los últimos 11 ejercicios. El nivel de incremento lógicamente dependerá de cada predio, pero se estima en el orden del 7% al 10 % respecto al ejercicio pasado.

A su vez las relaciones de precios (kilos de productos para comprar determinados insumos) se mantienen en posiciones favorables para los ganaderos. La excepción es que se empeora la posición de los precios relativos frente a los precios de combustibles y salarios.

En kilos de novillo en enero-febrero 2013 se necesitaban 98,5 kilos para comprar 100 litros de combustibles, frente a 96 de igual período de 2012 y de 91 kilos del período 2002-2012.

En cambio la posición del ternero es la mejor de la serie, al comprar los 100 litros de combustibles con 75 kilos, frente a los 83 kilos de la media de la última década.

Con las dos excepciones antes mencionadas, las actuales relaciones de precios se aproximan a las mejores de la década, ocurridas por los años 2003 y 2004.

Es posible concluir, por tanto, que si los precios corrientes se multiplicaron por tres en ese período (en promedio), también las cotizaciones de insumos se comportaron de esa manera, afirma Molina.

Por lo tanto, esas adecuadas relaciones de precios posibilitan el uso inteligente de los diferentes insumos, con el objetivo de potenciar los distintos sistemas ganaderos, con el objetivo de mejorar los procesos y alcanzar un aumento de la productividad, según el experto.

Según el trabajo del IPA es posible esperar resultados prediales. al cierre del ejercicio en junio próximo, similares a los alcanzados en el período anterior, incluyendo el mantenimiento de los buenos precios vacunos y la buena situación climática.

Mejor para las praderas y la canasta familiar
El estudio del Instituto Plan Agropecuario (IPA) respecto a la relación de precios de julio de 2012 a febrero de 2013 muestra una posición favorable para la instalación de praderas.

Luego de la pésima posición relativa de los años 2008 y 2009, donde eran necesarios en el orden de los 300-380 kilos de novillo o ternero para hacer una hectárea de pradera, para los años siguientes la situación ha mejorado y parece haberse estabilizado en el orden de los 225 kilos de novillo y los 170 kilos de ternero el precio relativo de la hectárea de pradera, señala el estudio del ingeniero agrónomo Carlos Molina.

A su vez la canasta familiar  mensual es muy similar a la de los últimos dos ejercicios: se necesitan 900 kilos de terneros mensuales o 1.200 kilos de novillos para cubrir esa necesidad. Actualmente se necesita un 16% menos de kilos de ternero que el promedio de la década, mientras que el promedio de novillo mejoró 2%.

También es favorable la evolución de precios de kilos de novillo y de vaca de invernada para comprar una tonelada de ración de engorde con 12% de contenido proteico, mientras que se deteriora en el uso de raciones con trigo y arroz.