México sí le gusta la carne de caballo

Por ser baja en grasas y rica en hierro y proteína animal, la carne de equino es altamente recomendable para el consumo humano.

México se consolida como un permanente exportador de carne de caballo a países del “Viejo Continente” y a Asia; Bélgica, Rusia, Francia, Suiza, Japón y Vietnam, son grandes consumidores.

Cada año en promedio se exportan a los mercados internacionales alrededor de 13 millones de kilos de carne de equino.

En México existen sólo 3 empacadoras o rastros Tipo Inspección Federal dedicados al sacrificio y exportación de carne de caballo para consumo humano, una está en Aguascalientes y las otras dos en Zacatecas.

En conjunto, son sacrificadas hasta 70 mil cabezas de ganado equino.

Antonio Félix Domínguez, jefe del Departamento de Salud Animal de la Sagarpa, señaló que del abasto total de caballos que se tienen para sacrificio, 70% es importado de Estados Unidos, “son animales que van directo al sacrificio, las plantas de Fresnillo y Jerez hacen una importación semanal de 600 animales”, dijo.

Se trata de caballos que sirvieron al Ejército de los Estados Unidos, y que ahora son animales viejos y de desecho.

“Son animales que ya cumplieron su vida productiva, que tienen algún problema de salud, que ya no les permite hacer su trabajo físico o excedentes de donde se crían los caballos“, aseveró Antonio Félix Domínguez.

De los 13 millones de kilos de carne de caballo que se producen en México, el 90% va a mercados extranjeros y el 10% restante se consume en México.

“Los datos que tenemos en la comercialización nacional es que se movilizan cortes de carne para el consumo humano a comedores industriales y algunos hospitales que dan este tipo de carnes y algunas carnicerías que existen en algunas ciudades de Monterrey y Guadalajara“, puntualizó Félix Domínguez.

Además de México, sólo Argentina y Uruguay son países autorizados para el sacrificio y exportación de carne de caballo.

Por ser baja en grasas y rica en hierro y proteína animal, la carne de equino es altamente recomendable para el consumo humano.