Para pensar y accionar frente a la lechería de hoy
Un informe de la Unión General de Tamberos (UGT) describe las posibilidades de la lechería argentina en la coyuntura actual, e incluso propone acciones posibles frente a las limitantes del mercado local e internacional.

Para pensar y accionar frente a la lechería de hoy     LECHERÍA   Fonterra pronostica alza en los precios de los lácteos     Bacterias benéficas para incorporar a la leche en polvo     Subas de alrededor del 15% de los quesos en puerta de fábrica
	Entre los ítems que propone la UGT para pensar soluciones a los existentes problemas de la cadena lechera, se describe una situación actual y posibles formas de enfrentar sus efectos adversos: - Hay una distorsión entre oferta-demanda, mercado interno-externo. - Si falta leche se concentra por oferta de precio de las grandes industrias y éstas hacen diferencia sin compartirla. Al mismo tiempo se concentran los tambos y se reconoce el volumen total perjudicando a los más chicos. El mercado interno aumentó los precios, la leche de exportación algo también pero el productor sigue cobrando alrededor de 1.70. - Si sobra, las PyMES presionan sobre mercado interno y baja el precio relativo. También algunas juntan leche y/o suero para enviar a secar a las grandes industrias sin generar competencia y que llegue un precio razonable al tambero. - Los precios mundiales inciden sobre expectativas pero la relación de cambio, que por un lado frena las exportaciones por el otro limita los costos del tambo,  no resuelve hoy el tema de fondo. Los precios mundiales han mejorado en los últimos días pero no se trasladaron los precios al productor. La industria ha tenido una mayor recomposición pero justifican las diferencias por un aumento de los salarios, la inflación y el menor monto total por ventas con volúmenes sostenidos de venta en el mercado interno. - La limitantes son dos: 1. El sistema productivo es con esta relación de cambio realmente un freno para exportar. 2. Por el otro el precio del mercado interno pisa el margen posible a repartir y justificaría el mal reparto dentro de la cadena láctea. - ¿Cuáles son nuestras posibilidades ante el mercado internacional? 1- Competir por precio; 2- Hacer convenios bilaterales (Brasil, Estados Unidos, China y otros de comprar a precio cerrado). Éstas alternativas tienen patas cortas en un mercado abierto y son posibles ante economías cerradas. Igual si uno tiene precio competitivo está mejor posicionado. 3- Subsidiar la exportación mediante cualquier sistema de compensación (llevando a pelearse con la posición argentina histórica y acuerdos internacionales tomados y firmados) - ¿Cuáles son nuestras posibilidades en el mercado interno? Sólo si vendemos afuera sacando los excedentes y se elimina la presión en el mercado interno. Pero para esto las PyMES tendrían que tener alternativas para sacar los sobrantes (plantas de productores y/o del Estado nacional, provincial o regional, en condiciones de absorberlos, proyecto de PLASSACO, coordinado por Eduardo García Maritano). Si falta, no habría mayor dificultad pero ganan las grandes empresas y se pierde peso relativo. En consecuencia, aumentar el peso de la negociación de parte de los productores es clave. También los precios de referencia y la transparencia de los mercados pueden servir, siempre y cuando el productor tenga peso como para pelearlos o el Estado (presiones mediante) haga de interlocutor. Los precios de referencia permiten también tener un mejor panorama de la realidad pero sigue siendo importante el poder de negociación. - ¿Cómo juega el consumidor en esto? Sin duda, mucho. La demanda interna ayuda a descomprimir los mercados si éste es libre. Los subsidios dirigidos a este sector, en caso de ser necesarios, aumentan la posibilidad de llegada, igual que la disminución de la presión impositiva dirigida a determinado productos de uso masivo (leche en sachet, en polvo, etc. en determinadas zonas y/o sistemas).