“Hemos tenido la posibilidad de transferir 1000 reproductores a los distintos centros de desarrollo caprino en la provincia, a través de un programa instrumentado oportunamente. Además, pudimos observar todo lo que significa la producción de forraje hidropónico que sirve para identificar todas las variedades genéticas incorporadas para mejorar sustancialmente la calidad del rodeo caprino y ovino en la provincia”, destacó el primer mandatario provincial tras la recorrida.
El establecimiento, ubicado en el departamento General Dónovan, lleva el nombre del antiguo propietario de esa colonia uno de los pioneros y más importantes colonos de la zona, quien habría adquirido una gran extensión de tierras hacia 1888, estableciendo obrajes para la explotación de bosques. Ahora, fue recuperado con aportes del gobierno provincial, convirtiéndose en un establecimiento demostrativo. “La introducción de razas ovinas como Dorper o Santa Inés permitió generar sustancialmente la producción y rendimiento de kilo por cada unidad de animal. En cabras, la raza introducida es la Boer”, agregó Capitanich.
Las instalaciones del establecimiento Juan Penco fueron remodeladas, restauradas, readecuadas y ampliadas, para que allí funcione la sede del programa nacional de mejoramiento genético para ganado ovino y caprino en nuestra provincia. La inversión alcanzó la cifra de casi 1.000.000 de pesos. Junto al titular del Ejecutivo provincial, recorrieron el predio el ministro de la Producción, Enrique Orban; el subsecretario de Recursos Naturales, Miguel Herman Brunswig y el intendente de Makallé, Juan Carlos Svriz.
Vivero forestal
La oportunidad sirvió además para que la comitiva observara el vivero forestal con variedad de eucaliptus, cuyo objetivo es incrementar la producción de plantines. “Acá vamos a tener 300 mil plantines para abastecer al fideicomiso forestal de 100 mil hectáreas programas en los próximos 12 años. Esto es muy bueno porque brindará sustentabilidad ambiental a la provincia, garantizará producción forestal de buena calidad y generará un efecto multiplicador en el desarrollo económico”, comentó Capitanich. Así finalizó: “En la provincia tenemos tres viveros forestales en la provincia (San Bernardo, Sáenz Peña y Concepción del Bermejo), pero con distintas características y de diferentes niveles de producción genética-forestal”.
A su turno, el intendente Juan Carlos Svriz recordó que este establecimiento “es un orgullo, que lamentablemente se dejó estar en los gobiernos anteriores. Pero a partir de la gestión del gobernador Capitanich se está renovando todo esto”. Finalmente, comentó que para este 13 de julio, aniversario de Makallé, “vamos a inaugurar la primera planta de residuos sólidos en el Chaco y un jardín materno-infantil, dos obras de esta magnitud para esta localidad que significan un éxito”.
Forraje hidropónico y distintas razas
En el vivero de forraje verde hidropónico se realiza la germinación de semillas, ya sea de avena, trigo, centeno o maíz. A doce días de la germinación, la planta alcanza una altura aproximada de 25 centímetros. El producto que se obtiene es en definitiva un alimento balanceado natural para todo tipo de animales, cabras, ovejas, vacunos, caballos.
Respecto de los sistemas tradicionales, cuenta con la ventaja de poder disponer de forraje verde durante todo el año, aún en épocas de sequía y se produce con muy poca agua debido a que se pueden lograr por día 1.500 kilos que se riegan diariamente con 2.500 litros de agua y se recuperan 1.500 litros.
En cuanto a la raza caprina, la introducida en el establecimiento de Makallé es la Boer. Se trata de un tipo indígena mejorado, con influencia de algunas razas europeas, cabras Angora y cabras Indicas. Son de estructura robusta, buena alzada, pelo corto, orejas largas y cabeza astada.
Por su parte, en ovinos se introdujo Dorper y Santa Inés. La raza Dorper fue desarrollada en Sudáfrica para soportar los ambientes más severos de climas y temperaturas extremas en las condiciones áridas lográndose obtener un excelente animal. Fue pensada con el objetivo de lograr una raza fundamentalmente de producción de carne y adaptable. Es una excelente oveja, con una gran capacidad de conversión de pastura en carne (en menos de cuatro meses los corderos alcanzan fácilmente los 35 kilos).
El rebaño de ovejas de pelo, principalmente de la raza Santa Inés ha logrado un considerable crecimiento en las regiones sudeste y centro-oeste del Brasil, en Paraguay y en algunas zonas de Argentina debido a su capacidad de adaptación, rusticidad y elevada eficiencia reproductiva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.